Málaga ha querido ofrecer al sector turístico un aperitivo de lo que será el futuro Museo Carmen Thyssen-Bornemisza, que se inaugurará durante la primavera de este 2011. Para ello, coincidiendo con la celebración de la Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid ha mostrado este lunes por primera vez 50 de las alrededor de 230 piezas que compodrán el futuro museo, que estará ubicado en pleno centro de la capital.
El alcalde, Francisco de la Torre, ha asegurado que es un día "muy importante dentro de los actos de Fitur" y que el espacio en el que se celebrara ese acto, el Museo Thyssen, "es un lugar muy especial".
En este museo estarán expuestas las obras del museo malagueño durante unos días para que puedan ser admiradas por los profesionales del turismo que se dan cita hasta el domingo en la capital de España. Entre estas obras figuran cuadros de Sorolla, Carlos de Haes, Regoyos o Zuloaga. Este medio centenar de obras es un un anticipo de lo que a partir de la próxima primavera podrá verse en el Palacio Villalón, sede del Museo Colección Carmen Thyssen-Bornemisza de Málaga.
De la Torre señaló que la construcción de esta pinacoteca es una "muestra del compromiso de Málaga con el turismo cultural". Además, ha asegurado que el Ayuntamiento seguirá trabajando en esta línea y ha recordado que hay otros proyectos en marcha como el Museo de Bellas Artes o el de Art Natura en Tabacalera.
Por su parte, la baronesa Thyssen se ha mostrado "muy emocionada" porque siempre ha estado "enamorada de Málaga" y ha manifestado que, con la construcción del museo, siente que ya forma "parte de la ciudad".
En el acto, que sirvió de punto de encuentro para el mundo de la cultura y el turismo, tanto De la Torre como la baronesa estuvieron acompañados por la directora del Museo Thyssen de Málaga, María López, y el director artístico de la pinacoteca madrileña, Guillermo Solana.
El futuro museo
Uno de los cuadros más destacados de los que puede verse durante estos días en el Thyssen es 'La fuente de Reding', de Gómez Gil, un guiño local en la colección de arte español y andaluz del siglo XIX que conformará el museo, en este momento en construcción en el Palacio Villalón, un edificio del siglo XVI rehabilitado por el Ayuntamiento y situado en calle Compañía, junto a la Plaza de la Constitución.
La colección permanente de este edificio va a estar compuesta por alrededor de 230 obras, que son una compilación de lo más granado del arte español del siglo XIX y que pemitirá construir una historia de la pintura andaluza y española de esa época.
El recorrido se iniciará siglo y medio antes, con un espacio dedicado a los maestros antiguos y que se ubicará en la en la antigua capilla del Palacio de Villalón. Este conjunto está presidido por la Santa Marina de Zurbarán. Junto a ella, se presentarán cuatro importantes óleos en torno al nacimiento e infancia deCristo de Jerónimo Ezquerra, de finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII.
Habrá también una sección dedicada a cómo se ha reflejado el paisaje del romanticismo al naturalismo. En este espacio se mostrarán las grandes transformaciones que experimenta el paisaje como género pictórico durante el romanticismo. Entre las obras de artistas españoles, destacan las pinturas de Eugenio Lucas Velázquez y de Jenaro Pérez Villamil, el gran paisajista romántico por excelencia. La evolución del paisaje viene marcada por la personalidad de Carlos de Haes que realiza una interpretación realista del paisaje. Entre sus discípulos destaca sobremanera Aureliano de Beruete. Esta sección, articulada en torno a estas dos grandes figuras, muestra asimismo el desarrollo del paisajismo naturalista en Cataluña, Valencia y Andalucía.
El museo tendrá un apartado en la que se mostrará el costumbrismo. La sección se inicia con francés Dehondecq. Junto a ellos, se presentará la mejor pintura costumbrista andaluza. Autores como Mariano Fortuny, José Benlliure, José García Ramos o Lucas Villaamil estarán presentes en estas salas.
Por último, habrá unas salas dedicadas al fin de siglo, al periodo en el que se produce la modernización de la pintura española, cuando comienza a mirar a la pintura parisina. La escuela valenciana estará representada en esta sección por Muñoz Degrain o Emilio Sala, y mostrará sus mejores frutos a través de la pintura de Sorolla. La imagen luminosa y optimista del valenciano contrastará con la ofrecida por otros artistas más relacionados con los escritores devla generación del 98, como es el caso de Julio Romero de Torres, López Mezquita o Ignacio Zuloaga. De forma paralela, la presencia de Darío de Regoyos refuerza la vocación internacional de la pintura española de este periodo. El Museo también ofrecerá una muestra de las propuestas novedosas de algunos artistas españoles que tuvieron contacto con la bohemia parisina como es el caso de Ramón Casas, Ricard Canals o Francisco Iturrino. Estos artistas elaborarán un lenguaje claramente moderno, aunque continuarán cultivando temas de asunto andaluz.
Desde la apertura del museo se establecerá un importante programa de exposiciones temporales, de producción propia, en colaboración con importantes instituciones culturales de consagrado nivel internacional, y en estrecha asociación con el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid.
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